EL CONSEJERO DEL RCD Español, Víctor Malet, aseguró el jueves que los suscriptores de la ampliación de capital del Español no se plantean la operación desde el punto de vista financiero, “sino desde el sentimiento de pertenencia y de propiedad de su club de toda la vida y de lo que representan sus colores”. Con estos argumentos defendía en La Plaça -programa de radio que presento junto a Juan García- el optimismo del consejo del club sobre la ampliación de capital lanzada esta misma semana.
El lunes el Espanyol acudía al mercado para vender al menos seis millones de euros en nuevas acciones. El actual consejo, que posee el 51% del capital, acudirá a la ampliación aportando los algo más de seis millones que le corresponden suscribir. Vender el resto, hasta alcanzar los 12 millones totales fijados, “va a ser un objetivo complicado” debido a la situación económica general, reconoció Malet. Sin embargo esta operación “es un requisito de obligado cumplimiento del crédito sindicado que suscribimos para construir el nuevo estadio”, explicó el consejero del club de fútbol.
La ampliación de capital fue aprobada por la última junta de accionistas, celebrada en noviembre. De esta manera, el Espanyol asegura con el aval de su actual consejo la amortización parcial del crédito mientras que el resto del capital, captado en el mercado, servirá para reforzar la situación de tesorería de la entidad. Víctor Malet aseguró que esta ampliación es además “un gesto para que el capital del club no esté dominado por unos pocos, sino que lo que pretendemos es tener la difusión máxima de capital posible”. “Queremos convertirnos -remachó- en el club de España con más accionistas”. Malet se mostró convencido del éxito de la colocación ya que “el Espanyol es una pequeña perla” del fútbol europeo.
Gestión económica
“Somos pocos los club que podemos decir que tenemos un patrimonio que sustenta la entidad”. Según el consejero de RCD Español, la mayoría de los equipos de primera y segunda división no tienen patrimonio. El fútbol profesional está pasando “por momentos de apuros”, dijo: “son negocios deficitarios y difíciles de soportar”. Tras la venta de Montjuic en 1997, "en el Español nos quedamos prácticamente sin nada”. Sin embargo, “Daniel Sánchez Llibre ha conseguido darle la vuelta a la situación y hoy además del estadio tenemos una ciudad deportiva, con lo que nuestra situación financiera dista mucho de la del resto de equipos de primera y segunda división”.
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